LA FILOSOFÍA Y LA BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD 

La filosofía helenística se desarrolla en un largo período de tiempo, desde la muerte de Alejandro Magno en el 323 a.C. hasta el 30 d.C. fecha en que Octavio Augusto incorpora Egipto a Roma tras derrotar a Marco Antonio y Cleopatra. La compleja situación histórica dará origen a una inquietud que inclinará a los hombres a buscar consuelo en doctrinas que le permitan equilibrio personal frente al cambiante mundo político. Nacerán hombres deseosos de encontrar doctrinas de esperanza y felicidad. 

AMBIENTE SOCIOCULTURAL 

A partir de la segunda mitad del siglo IV, la vida política y social del mundo ateniense se vuelve cada vez más compleja, sobre todo por la intervención de una nueva potencia: Macedonia. Grecia es derrotada por Filipo a quien sucedió su hijo Alejandro Magno. Muerto Alejandro se constituyen las monarquías helenísticas. Los ciudadanos griegos libres se ven convertidos en súbditos. La polis deja de ser el lugar de referencia y se va perdiendo la conciencia de pertenencia a una comunidad. Aparecen nuevos centros culturales, Atenas deja de ser la ciudad de la filosofía y la misma se abre al gran público. El centro cultural es ahora Alejandría, en Egipto, lugar de encuentro de las filosofías de Oriente y Occidente. Se dan allí a conocer formas religiosas y de pensamiento provenientes de Persia, Judea, India, Egipto. El desarrollo de los reinos helenísticos coincide con la expansión de Roma, que extiende sus dominios en la península Itálica y en el Mediterráneo. Pronto Macedonia pasó a formar parte de Roma al igual que Grecia, convertida en Acaya. Los movimientos religiosos y filosóficos de los pueblos conquistados irán calando en el mundo cultural romano. 

LA NOVEDAD 

La helenización de la cultura de esta época supone una influencia general de los modos de pensar griegos. El griego o Koiné se convierte en la lengua oficial del imperio. La existencia de esta lengua y la difusión del papiro permiten la difusión del conocimiento que difunden la filosofía y la ciencia. La época se caracteriza por el estudio de los problemas particulares, matemáticos, físicos, médicos, etc. Desde ahora sabio no será el que haga teorías generales sino el que es capaz de solucionar problemas concretos. La tendencia hacia la especialización favorece la aparición de estudios sobre la lengua que dan origen a la gramática. Impulsadas por las conquistas adquieren también su importancia, la historia y la geografía. Las transformaciones culturales van acompañadas de nuevas formas de organización social. Aparece una nueva concepción de poder basada en el culto al soberano, por considerarlo ligado a la divinidad o a los héroes del pasado. Surgen las monarquías en que la ley proviene directamente del monarca. La aparición de la corte impulsa el desarrollo de las ciudades, centros administrativos que permiten un mayor control de los territorios conquistados. Es una época de urbanismo creciente, lo que facilita la aparición del comercio y la expansión cultural y artística. Es característico también el retorno a la naturaleza. La añoranza de la paz frente a la turbulenta situación social y política del imperio. 

EL MOVIMIENTO HELÉNICO Y SUS PRECURSORES 

Los filósofos de la época tratan de construir doctrinas que den respuesta a sus inquietudes personales, a la desorientación individual, su filosofía es de carácter ético. Se destacan el Estoicismo, el Epicureismo y el Escepticismo. Como precursores se encuentran los cirenaicos, escuela fundada por Aristipo de Cirene y que se basa en la búsqueda del placer, el rechazo de toda certidumbre intelectual y el abandono de todo convencionalismo social. y los cínicos fundados por Antístenes y su famoso discípulo Diógenes. Los cínicos buscaron la tranquilidad del espíritu en el desarrollo de los ideales socráticos y sus postulados los llevaron al rechazo de lo mundano y a un vivir de acuerdo con la naturaleza.